miércoles, 22 de agosto de 2007

¿Volveremos a festejar alguna vez?


¿Por qué poner en juego el prestigio y la historia? ¿Qué sentido tiene tirar en la cancha 11 jugadores, sin entrenamiento previo, algunos faltos de fútbol y la mayoría faltos de ganas?

Hace algún tiempo comentamos en este blog, que a la selección ya no se la podía considerar una potencia mundial y el paupérrimo amistoso contra la inexistente selección de Noruega en el que el conjunto nacional perdió 2 a 1 no hace más que confirmarlo.

Las selecciones menores ya no nos respetan y las selecciones de renombre ya no quieren -o no les interesa- jugar contra la Argentina.
Nos van a decir que estos amistosos traen dinero, pero si se sigue rifando la jerarquía y la trayectoria de la selección, el caché será cada vez menor y por ende los ingresos serán cada vez menores.

La AFA perdió el rumbo. Su presidente Julio Humberto Grondona no tiene nada más para aportar (sólo errores). Su técnico, Alfio Basile, no está a la altura del fútbol de selecciones de este siglo.

Pero la AFA no es el Vaticano, los cargos no son hasta la muerte de quienes los ocupan, se pueden renovar.

Los dirigentes de nuestro fútbol tienen que dejar de aceptar las migajas que les tira el ferretero de Sarandí. Deben hacerle frente y renovar la conducción de la AFA.

Si no lo hacen, el fútbol argentino se va a morir antes que Grondona.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hay q darle tiempo, el Coco es un genio. dificil debe ser armar un equipo q sepa jugar si no se juntan nunca.

Recomenzar dijo...

Muy interesante tu blog, te sigo desde hoy

Anónimo dijo...

El presidente de la AFA hace rato que no aporta, sino todo lo contrario: recauda para su peculio...