Más allá del lanzamiento con bombos y platillos en Mar del Plata, la fórmula del Frente para la Victoria de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli y Alberto Balestrini, será presentada ante la justicia electoral el último día posible, es decir, el 8 de septiembre.
Dentro de los cinco días corridos a esa fecha comenzarán las impugnaciones. Quienes ya anunciaron que intentarán detener a Scioli por la vía judicial son: Jorge Sarghini, perteneciente al UNA, el partido de Roberto Lavagna y Margarita Stolbizer de vaya a saber uno qué porque la fórmula radical hasta donde sé es Ricardo Alfonsín y Luis Brandoni. A estos dos dirigentes se le sumarán partidos de izquierda, socialistas y alguno más.
Durante 10 días leeremos en los diarios, escucharemos en la radio y veremos en la tele todo tipo de opiniones, constitucionalistas declarando sobre la validez o la nulidad de la candidatura del ex motonauta, candidatos opositores descargarán su furia contra el vicepresidente y lo acusarán de ser el peor de los traidores de la patria por realizar un cambio de domicilio y poder presentarse en un distrito que no es el suyo. Cosa que ya hicieron en su momento Ruckauf, Carrió, López Murphy, Erman González y la mismisima reina Kristina.
Durante todos esos días y hasta que la justicia electoral habilite a Scioli, porque lo va a habilitar, ningún opositor nos dirá que va a hacer en el caso de ser elegido gobernador. Serán gentilmente invitados a A Dos Voces, a La Cornisa, al programa de Santo, al del Dr. Castro y con suerte alguno almorzará con la señora y sólo van a hablar de Scioli.
Mientras tanto el vicepresidente seguirá recorriendo la provincia, hablando con la gente y todo lo que hay que hacer en una elección que sólo será un trámite.
Los bonaerenses ya saben quien es Balestrini, gobernó casi 10 años el mayor municipio de la Argentina, la Matanza. Los bonaerenses ya saben quien es Scioli, se trata nada menos que del vicepresidente de la Nación.
Sarghini, Stolbizer, Jorge Macri, Blumberg, De Narvaez y todos los que deberían darse a conocer por sus votantes, desaprovecharán su momento de gloria en trámites burocráticos.
Una pena
5 comentarios:
Stobizer va de candidata en una alianza con la Coalición Cívica de Carrió y otros partidos....
Está claro que la justicia no va a invalidar la candidatura de Scioli...imaginate...si en la Provincia arrastra la mayor parte de los votos que irán para Cristina...Respecto a los opositores, me parece que denunciar la candidatura de Scioli tal vez sea una manera ganar difusión....
Tomás
El problema realmente serio que yo veo para los restantes candidatos, es que no tienen plata para pagar una campaña electoral, y mucho menos competir contra un kirchnerismo al que le sale plata por las orejas.
Exceptuando a Sobisch, y hasta cierto punto a De Narvaez, el resto atraviesa serevas económicas, lo cual desde el vamos condiciona sus chances.
En cuanto a la impugnación a Scioli, es evidente que no va a prosperar, como tampoco prosperaría una contra Bielsa, que va de candidato a gobernador en Santa Fé, siendo actualmente diputado por la ciudad de Buenos Aires.
Aaaaasí y todo, no me creo las encuestas truchas que difunde el gobierno, y tengo esperanza en que una palabrita empiece a sonar cada vez con más fuerza, con más bríos, con más energía.... ballotage, ballotage, ballotage!
Pero por favor!!! Candidatos elegidos en internas abiertas y transparentes no tienen por qué salir a darte explicaciones de nada, caramba!!!
Tiene razón Juan de los palotes, olvide al poeta cantautor Rafael Bielsa, diputado por capital federal, casi embajador de Francia, candidato ahora por Santa Fe y títere oficial de Néstor.
Opiniones independientes:
Si en la lista cabe Cristina Fernández de K, entonces también es un olvido el de Graciela Fernández Meijide en 1997.
Según la Constitución Nacional, ninguna de las dos tuvo necesidad de cambiar de domicilio, porque ambas eran nacidas en la provincia de Buenos Aires. No sé si lo hicieron, pero no hacía falta. Idem para el tan vapuleado Bielsa, nativo de Santa Fe (la Constitución provincial también lo habilita).
De todas maneras, coincido en que el asunto del domicilio o lugar de nacimiento es una solemne pavada formal. Si los votantes de, digamos, Catamarca, quieren votar a, digamos, un entrerriano, ¿por qué no podrían hacerlo?
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